RIAD, ARABIA SAUDITA . – Más allá de los golpes, las luces y la presión de una final, el WBC Boxing Grand Prix vivió uno de sus momentos más significativos fuera del ring este viernes.

Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo, sostuvo una charla íntima y profundamente emotiva con los 8 finalistas del torneo, un encuentro pensado no para hablar de táctica o preparación física, sino para mirar de frente el futuro de los boxeadores como personas más allá de las victorias sostenidas dentro del cuadrilátero.

A lo largo de la charla, el presidente del WBC reiteró un mensaje constante: Los boxeadores no están solos. El organismo, subrayó, mantiene siempre los brazos abiertos para apoyarlos, orientarlos y encaminarnos, ya sea en momentos de gloria o en etapas de transición y dificultad. La intención no fue dar lecciones, sino compartir herramientas y acompañamiento.

La plática se desarrolló en un ambiente de confianza y cercanía. Sulaimán compartió reflexiones nacidas de años de experiencia al frente del organismo, abordando la importancia de la prevención en distintos ámbitos que marcan la carrera y la vida de un peleador. El enfoque fue claro: el boxeo no termina cuando suena la campana final, y cada decisión tomada durante la etapa activa puede definir el rumbo de los años posteriores.

Uno de los ejes centrales del mensaje fue el aspecto financiero. Sulaimán habló con franqueza sobre la necesidad de administrar con inteligencia los ingresos, entender los ciclos de la carrera profesional y prepararse para escenarios diversos, desde el éxito sostenido hasta el retiro anticipado. También se tocaron temas sociales, el impacto de la fama, las influencias del entorno y la responsabilidad que conlleva convertirse en un referente para la familia y la comunidad de cada uno de sus países.

El encuentro estuvo cargado de emoción con palabras que resonaron firmemente entre los finalistas del WBC Boxing Grand Prix entre los finalistas del WBC Boxing Grand Prix, quienes entendieron que este su legado y su responsabilidad no culmina este sábado, si no que perdura a través de los años.